Involúcrese

Cuando una persona con pérdida auditiva lleva audífonos, implantes cocleares o ambos dispositivos, normalmente oye mejor por un oído. Por este motivo, es importante tener en cuenta en qué lugar prefieren sentarse o dónde prefieren que se coloque usted para poder oírle mejor. Además, se pueden integrar micrófonos remotos con los audífonos e implantes cocleares para mejorar la comunicación en ambientes ruidosos y en la distancia. 

Tenga en cuenta que los dispositivos auditivos pueden descolocarse o caerse de la oreja o de la cabeza, por lo que es posible que la persona quiera parar y recolocar el dispositivo. Puede resultar útil hablar de antemano y decidir si prefiere retirarse el dispositivo en los momentos íntimos o establecer alguna señal para indicar que hay poca iluminación y no se ve.

Todo el mundo sabe que la comunicación en una relación es fundamental. Debido a que las personas con pérdida auditiva pueden tener más dificultades a la hora de comunicarse, la paciencia y la comprensión son muy necesarias.

Al estar en una relación con alguien que padece pérdida auditiva, es totalmente normal tener preguntas. De hecho, la curiosidad se valora positivamente. A medida que pase el tiempo, lo entenderá todo mejor. Es posible que incluso aprenda más sobre usted.

Si algo le preocupa o incomoda, es fundamental hablarlo abiertamente. Por ejemplo, si su pareja pone la música demasiado alta, pídale amablemente llegar a un acuerdo.

Si se dedica a la formación y en su clase hay algún alumno con pérdida auditiva, les resultará muy beneficioso que comprenda cómo funciona la pérdida auditiva y busque soluciones creativas a los problemas que puedan surgir. Además, la comunicación eficaz con el alumno es fundamental.

Si jamás ha padecido pérdida auditiva, es posible que no sepa exactamente de qué manera afecta a la audición de un niño. Basta con investigar un poco sobre algunos puntos básicos de la pérdida auditiva para entender mejor los retos a los que se enfrentan los alumnos con pérdida auditiva en el aula. Con más conocimientos, podrá enfrentarse a este tipo de retos con técnicas que resultan muy útiles, como bajar el tono de voz, ofrecer un asiento preferencial, mejorar la pronunciación o colocarse de frente al alumno al hablar.

Si el colegio o la institución cuenta con algún profesional especializado, por ejemplo, un audioprotesista externo, un logopeda o un profesor de educación especial, es importante dialogar y colaborar con ellos. 

Para las personas con pérdida auditiva, tratar de oír lo que ocurre a su alrededor es un esfuerzo agotador. Si alguna vez ha visitado un país extranjero cuya lengua no habla con fluidez, imagine la sensación de intentar constantemente deducir el significado, traducir signos e interpretar un idioma todo el día. 

Si tiene algún alumno con pérdida auditiva, es una buena idea definir un recordatorio periódico para interesarse por cómo progresan en su día a día. Se trata de un gesto muy sencillo que puede marcar la diferencia ante los ojos del niño.

La tecnología auxiliar auditiva es una solución inclusiva para el aula que aumenta el acceso al sonido y reduce el ruido ambiente. El Roger^™ Touchscreen Mic es un micrófono para audífonos que el profesor puede colocarse alrededor del cuello o poner sobre un pupitre para que recoja el habla de un grupo de alumnos, lo que permite a los niños con pérdida auditiva participar de manera activa en el aula.  

Si crea un entorno en el que un niño con pérdida auditiva se siente cómodo para avisar de que no oye, estará ayudando a cambiar la vida de muchos de los alumnos a los que enseña.